Seguidores

domingo, 25 de diciembre de 2011

No me cansaré de repetirte:

que voy a quererte hasta después de la muerte, porque los muertos también aman. Y yo te quiero con toda mi alma y el alma nunca muere.

martes, 20 de diciembre de 2011

Sé que de vez en cuando se te escapa mi nombre, aún me quieres.

Y es que aún lloro cada vez que veo tus fotos. Recuerdo tantos momentos a tu lado, tantas conversaciones sin hablar. Extraño mirarnos a los ojos y saber perfectamente que has dicho, extraño que vinieras y sin decir una palabra me abrazaras, porque sabías que aunque estaba sonriendo estaba rota por dentro y necesitaba que algo me uniera los pedazos rotos de mi cuerpo. No sabes cuanto me duele no ver tu sonrisa por las mañanas. Odio tener que admitir que no escuchar voz me quema por dentro. 
Tengo guardados todas y cada una de las cosas que me diste, y cuando digo todos son todos, ahí también incluyo esos dibujos del colegio que me dabas sin ningún motivo. Ya casi no recuerdo tu olor. Sufro cada vez que al encontrarnos acabas apartando la cara, para no cruzar nuestras miradas, creo que a ti te duele casi tanto como a mí, pero tú no llegarás a entender lo importante que fuiste y sigues siendo para mí. 
Me siento estúpida, porque estoy llorando por esto, porque sé que no volveremos a vernos, y todo esto nunca volverá a ser como lo era antes. Cada día que pasa me desarmo un poco más porque te noto cada vez más lejos de mí. Creo que piensas que soy tonta, pero esta tonta pase lo que pase sabe que siempre estará ahí para ayudarte cuando necesites una mano amiga. 
Porque aunque nunca hubo te quieros, tienes que admitir que lo nuestro también fue una relación.

sábado, 17 de diciembre de 2011

...y que mi corazón seguirá el compás de su respiración.

Mi bocca baciò tutto tremante.


Y dices que tienes corazón, simplemente porque notas un ritmo continuo dentro de tu pecho. Tú no sabes lo que es eso, no sabes lo que es el amor. Nunca nadie te quitó el sueño, ni sentiste una quemazón dentro ti cuando lo besabas. Yo aún me pongo nerviosa cuando lo veo, y una bandada de mariposas se detienen en mi estómago cuando me dice te quiero. Porque mientras siga poniéndome nerviosa, y a continuación sonría y me muerda el labio agachando la cabeza, mientras siga contando demasiado y a veces demasiado poco, si continúo sonrojándome cuando al encontrarnos me salude diciéndome princesa. Si al vernos no puedo estarme quieta, todo el rato de un lado para otro. Si consigo, no hacerle sentir que fui la primera, sino que sienta que soy la única chica de su vida. Mientras yo le guarde sus más escondidos sentimientos y miedos, y al mirarle esboce una media sonrisa. Mientras haga todas esas cosas, te aseguro que seguiré enamorada de él...